Solo 7 vueltas pudo dar Sebastian Vettel en los Libres 3 de la matinal del sábado por sufrir un problema mecánico –y una reproducción del fallo– dada una pérdida de presión de agua en el motor. Después de eso, Ferrari tuvo que cambiar la unidad de potencia para calzar una no actualizada y con más kilometraje encima. De hecho, se rumorea que es la que usó desde el principio de la temporada en Australia.
A pesar del hándicap, el #5 ha encontrado hueco en la segunda fila de parrilla aunque no es demasiado optimista en cuanto a sus posibilidades de luchar por la victoria y mantener el liderato en el Campeonato del mundo. Sin embargo, en 2016 ya vimos sorpresas en Bakú y con la alta probabilidad de coche de seguridad junto a la larguísima recta de 2,2 kilómetros, el alemán sabe que tendrá opciones el domingo.
"Creo que el coche en general se comporta bien en cuanto nos sentimos a gusto con los neumáticos, creo que va bien y no hay más culpables. Supongo que mañana tendremos una historia diferente, pero empezamos desde detrás no ayuda. Pero la carrera es muy larga. La recta es larga. Veremos. Deberíamos tener buen ritmo, no espero ninguna sorpresa, pero dijimos lo mismo el año pasado y algunos sufrieron mucho en la carrera", ha explicado al bajarse del coche Vettel en los micrófonos de Movistar+ F1. SoyMotor.com
